Cuidado con las trampas

(Jessica se encuentra en grave peligro y no lo sabe)

Jessica: - Hola profe, ¿quería hablarme?

Profe Sofía: - Sí, hija. Escuché que vas a dejar el colegio.

Jessica: - ¡Ah! Es que me voy de viaje, fuera del país.

Profe Sofía: - ¿Te ganaste la lotería?

Jessica: - ¡No profe! Conseguí un buen trabajo.

Profe Sofía: - ¿En qué vas a trabajar?

Jessica: - En modelaje.

Profe Sofía: - ¡Ah! ¿Sí? ¿Y cuándo estudiaste esa carrera?

Jessica: - Eso no es una carrera, simplemente es cuestión de suerte, belleza y estilo, y yo tengo todo eso. Por esta razón me ofrecieron un buen contrato.

Profe Sofía: - ¿Has investigado quién te contrata? ¿Qué reputación tiene? ¿Qué otras personas han trabajado con ellos, y qué referencias dan de sus métodos y cumplimiento de promesas?

Jessica: - Pues no, profe, pero, ¿cómo se investiga eso?, ¿qué necesidad hay?

Profe Sofía: - Debes tener cuidado, hija. Si no verificas que sean de confiar, puedes ser víctima de trata de personas. La policía tiene informes sobre algunos grupos, pero también debes apoyarte en tus padres, o alguien de confianza, que te oriente para comprobar la veracidad de lo que te ofrecen.

Jessica: - ¿Y qué es trata de personas?

Profe Sofía: - Son grupos internacionales que engañan a jóvenes incautas, con falsas promesas, y luego en el exterior las convierten en esclavas sexuales, sometiéndolas a trato ignominioso y haciéndolas trabajar tan sólo por techo y comida.

Jessica: - ¡No me asuste, profe!

Profe Sofía: - No pretendo asustarte, sino alertarte de lo que puede suceder, si no te fijas bien con quién te vinculas, con quién te comprometes. No puedes ir aceptando una propuesta de extraños así no más.

Jessica: - Pues ya que usted me lo dice, voy a ver cómo verifico qué clase de personas son las que me han hecho la oferta.

Profe Sofía: - Es lo más sensato que debes hacer.

Jessica: - Muchas gracias, profe. Hasta pronto.